¿Cuáles son los síntomas de no haber superado el duelo?

Existe una serie de síntomas de no superar el duelo que conviene conocer cuando se atraviesa una situación así. Ser conscientes de cada uno de ellos puede ayudarnos a aceptar y sanar en esta dura etapa.

Perder a ser querido es una de las vivencias más difíciles que podemos experimentar. Y es que el duelo está repleto de sentimientos, a veces contradictorios, difíciles de gestionar y sobrellevar.

No obstante, también es cierto que no todas las personas lo viven de la misma manera. Para algunas es un proceso que les lleva a cuestionarse el sentido de la vida. Y, para otras, el dolor les conduce a recordar los mejores momentos vividos con el ser querido que se acaba de marchar.

¿Qué es el duelo y cuánto duran sus síntomas?

Aceptar la marcha de un ser querido puede llenarnos de tristeza, rabia, confusión y, en algunos casos, incluso alivio. Cada persona vive el duelo de manera única, y no existe una forma correcta o incorrecta de enfrentar esta pérdida.

En este sentido, el duelo se define como un proceso emocional y psicológico que experimentamos tras la pérdida de un familiar o amigo. Y, además, cabe añadir que implica una serie de reacciones emocionales y físicas, como tristeza, ansiedad, enfado, culpa, confusión, y en algunos casos, síntomas físicos como fatiga, problemas de sueño o cambios en el apetito.

Estos son algunos de los síntomas de no superar el duelo, pero hay más que decir al respecto. En los siguientes párrafos trataremos este tema con mayor profundidad y detalle.

Tipos de duelo

Si en tu entorno se acaba de producir la pérdida de un ser querido, es probable que no todos estéis llevando el duelo de la misma manera. Escucharás diferentes frases para superar un duelo.

Y es que al igual que existen varios síntomas de no superar el duelo, este proceso puede ser vivido de distintas maneras. Esto nos lleva a hablar de los tipos de duelo.

Normal. El duelo normal es aquel que experimentan la mayoría de personas y está formado por cinco fases: negación, ira, negociación, depresión, aceptación.
Sin resolver. También conocido como duelo complicado o duelo patológico, este tipo de duelo se caracteriza porque la persona no logra procesar adecuadamente la pérdida.
Anticipado. Hay veces en que, por desgracia, la pérdida es previsible, por ejemplo, cuando un ser querido sufre una enfermedad terminal. En estos casos, el tipo de duelo que se experimenta es el anticipado.
Ausente. Las personas que atraviesan un duelo ausente suelen negar la pérdida. Podemos decir que se quedan estancados en la fase de negación y niegan la realidad aún pasando el tiempo.
Crónico.Este tipo de duelo se caracteriza por un duelo que se prolonga durante un tiempo excesivo, sin que la persona logre adaptarse o aceptar la pérdida. El dolor y el sufrimiento puede continuar indefinidamente.
Inhibido. En el duelo inhibido, la persona evita o reprime las emociones asociadas con la pérdida, lo que puede resultar en que el dolor no se exprese o se manifieste de manera adecuada.
Retardado. ¿Alguna vez has conocido a alguien que, tras una pérdida, parece fuerte? Estas personas suelen experimentar el duelo al cabo de un tiempo. Esto es lo que llamamos duelo retardado.
Distorsionado. Cuando las reacciones al duelo son desproporcionadas, o fuera de lo común en comparación con lo que se espera en un duelo normal, se habla de duelo distorsionado.
Desautorizado. Por último, este tipo de duelo se refiere a situaciones en las que la sociedad o el entorno no reconocen la validez de la pérdida o del dolor que la persona está experimentando.

Duración del duelo y sus síntomas

Lo cierto es que no existe una duración estándar o normal para el duelo. Es más, para algunos, este proceso puede sentirse interminable, aunque es posible aprender a vivir con el dolor de una manera más llevadera. Dicho esto, podemos hacernos una idea generalizada de cuánto dura el duelo. Para ello nos basaremos en un proceso típico o normal:

Fase de negación. Esta fase puede durar desde unas horas hasta varias semanas, dependiendo de cómo la persona empiece a confrontar la realidad.
Fase de ira. Esta otra puede durar desde unos días hasta un par de meses. En algunos casos, incluso la ira puede reaparecer en momentos específicos.
Fase de negociación. Esta suele ser breve, durando desde unos días hasta un par de semanas. Sin embargo, puede reaparecer en momentos de estrés.
Fase de depresión. Es una de las más largas, puede durar de varias semanas a varios meses. Estos sentimientos disminuyen con el tiempo.
Fase de aceptación. Por último, esta no tiene una duración fija. Para muchos, puede aparecer a los 6 o 12 meses, aunque el proceso dure años.

¿Y cuáles son los síntomas de no superar el duelo?

Como decíamos, cada persona tiene su propio ritmo a la hora de procesar y superar el duelo. No existe un tiempo establecido en el que todo se resuelva. Es por ello, que, una vez pasado el tiempo, muchos experimentan los denominados síntomas de no superar el duelo. Aunque la lista podría ser más larga, estos son los más destacados:

Dolor emocional persistente

El dolor emocional que persiste sin disminuir con el tiempo es uno de los síntomas de no superar el duelo. Esto puede manifestarse como una tristeza profunda y continua que interfiere con la capacidad de disfrutar la vida, relacionarse con los demás o realizar actividades diarias.

Negación continua de la pérdida

La negación es un mecanismo de defensa común en las primeras etapas del duelo, pero cuando se prolonga, puede indicar un problema. Las personas que continúan negando la realidad de la pérdida actúan como si la persona fallecida aún estuviera presente o como si la pérdida no hubiera ocurrido.

Sentimientos negativos ante la pérdida

Sentimientos intensos de culpa, ira, resentimiento o desesperanza que no disminuyen con el tiempo también son síntomas de no superar el duelo. Estos sentimientos pueden ser dirigidos hacia uno mismo, hacia otros o hacia la situación en general.

Falsa euforia

En algunos casos, las personas pueden mostrar una apariencia de euforia o felicidad excesiva para evitar enfrentar el dolor de la pérdida. Este comportamiento, conocido como falsa euforia, es una forma de negación en la que la persona intenta convencer a los demás de que ha superado la pérdida.

Síntomas físicos

Otros síntomas de no superar el duelo pueden tener carácter físico. Por ejemplo, fatiga constante, problemas de sueño, cambios en el apetito que llevan a la pérdida o ganancia de peso y dolores físicos inexplicables . Estos síntomas pueden ser signos de que el cuerpo está reaccionando al estrés emocional no procesado.

Cómo afrontar los síntomas de no haber superado el duelo

Tal y como decíamos al inicio, afrontar un duelo no es un proceso fácil. Es más, está lleno de retos y dificultades que no afectan a todos por igual. Sin embargo, es posible trabajar hacia la sanación y la aceptación siguiendo consejos como estos:

Participar en grupos de apoyo. Para quienes experimentan síntomas de no superar el duelo, conocer a personas que ya lo vivieron, puede suponer un aire de comprensión y apoyo.
Autocuidado. El duelo puede ser agotador tanto física como emocionalmente. Por ello, es importante realizar prácticas para cuidar de tu bienestar físico y emocional durante el proceso de duelo.
Ofrecer una despedida digna. Otra forma de hacer frente a los síntomas de no superar el duelo es expresar todo el amor hacia un ser querido a través de una despedida digna, tal y como a él o ella le gustaría.
Apoyarse en los seres queridos. Por otro lado, evitar el aislamiento y buscar consuelo en otras personas de tu entorno puede ser algo positivo para enfrentar esta nueva situación.

A todo lo anterior, podemos añadir un último consejo: mantener vivo el recuerdo a través de objetos conmemorativos, por ejemplo, colgantes para cenizas de oro con las cenizas de tu ser querido. Este tipo de prácticas pueden ofrecer paz y consuelo e, incluso, ayudarte a mantener viva la conexión con quien ya no está. Sin duda, es un recordatorio que no solo te hará sentir mejor, sino que también honrará la memoria de tu ser querido.

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