5 ideas para afrontar la muerte de un ser querido
No hay una fórmula ni un truco secreto para superar o afrontar la muerte de un ser querido. De hecho, dependiendo de cómo seas y de la cercanía que tengas con esa persona, lo que podría servir para otra persona para superar esta situación podría no servirte de nada a ti.
Sin embargo, hay 5 ideas que podrían ayudarte a afrontar esa pérdida y que habitualmente funcionan a la mayoría de personas. Hoy queremos mostrártelas en Por Siempre para que puedas seguir adelante y conseguir superar esta pérdida.
1. Habla con otra persona sobre él o ella
Encerrarse en uno mismo no es positivo a la hora de superar el duelo por la muerte de un ser querido. De hecho, cuantos más sentimientos te guardes, más difícil te será poder dejar este momento atrás y seguir adelante.
Habla con otro conocido de esa persona sobre ella, recordad vuestros mejores momentos y pensad en todo lo bueno que habéis pasado con ella. Esto ayudará a aislar los recuerdos negativos de la reciente pérdida y hacer reflotar los antiguos recuerdos más positivos.
2. Mantente ocupado todo el tiempo
Si pasas tiempo solo, tenderás a pensar en la pérdida y podrías caer en una profunda depresión. Para evitarlo, mantente ocupado todo el tiempo posible, sin importar el motivo por el que lo estés.
Ofrécete a ayudar a otros, trabaja alguna hora de más, sal a pasear o correr, haz deporte y bajo ningún concepto te encierres en casa para superar la pérdida. Cuanto más tiempo pases solo y pensando en la pérdida de tu ser querido, más te costará superarla.
3. Recuérdalo con un objeto
No es necesario que preserves su habitación o todos sus objetos como si ese ser querido estuviera vivo. Eso solo hará que te sea más difícil superarlo y podría hacer que la fase de negación durante el duelo fuera incluso más larga.
Intenta concentrar todos sus recuerdos en uno o varios objetos. Por ejemplo, podrías crear una joya para ceniza y llevarlo siempre contigo para no olvidarlo jamás.
4. Cambia tu rutina
Si tu rutina diaria siempre estaba acompañada por ese ser querido, cámbiala. No debes estancarte en ella ni recordar cada momento todo lo que hacías con ella. Eso no significa que debas olvidar a esa persona, simplemente tienes que aprender a vivir sin ella.
5. Participa en el funeral
Hay veces que los familiares o amigos de la persona difunta prefieren alejarse y no estar en el funeral para no sufrir más. Se equivocan al hacerlo, ya que el funeral es una manera de decirle adiós y «oficializar» esa despedida de una manera más profunda.
Si no te despides de esa persona en ese momento, podrías arrepentirte toda tu vida y quedarte estancado por no haber participado en el último homenaje a ese ser querido que tanto amabas.
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